Senderitis 2010 (V)

Valle de La Barranca – Cuerda de Las Cabrillas

El Valle de la Barranca está situado al norte del pueblo de Navacerrada, por él discurre el Rio Navacerrada, terminando dicho valle en el embalse de Navacerrada (… como podéis comprobar se quiebran la cabeza a la hora de poner nombres…). Esta ruta la hice el Sábado 9 de Julio, pero no os la he mostrado antes porque quería completarla subiendo a la Bola del Mundo, pero entre bajadas a la playa, el calor que está haciendo y que no me atrevo a hacerlo solo, se complica esa marcha.

Hoy si que estoy bien preparado para la montaña, estrenando “Chirucas”, de un color “dudosete”… pero “melasuda”, están muy bien y de oferta, por 75 leuritos creo que he hecho una buena compra … la primera prueba la han superado sin ninguna indeseada rozadura, ahora que, el que diga que el famoso “gore-tex” es transpirable … “¡me lo como!” … el pié “encharcaíto” …

La Barranca es conocido porque en la parte baja del valle hay una zona recreativa, con dos pequeños embalses (donde no se permite el baño), donde Domingo tras Domingo se dan cita cientos de “Domingators”, con sus ruidosos hábitos, niños incansables y bien ataviados con todo tipo de viandas (la mitad de las cuales suelen dejar por allí esparcidas en forma de basura) …

Comenzamos la caminata siguiendo la pista forestal por la que hemos llegado, la cuál a los pocos metros de dónde hemos dejado el coche y tras pasar una barrera se queda sin asfalto, proporcionando un agradable paso en suave subida. A poco más de un kilómetro se abandona esta pista para tomar un camino conocido como “Senda Ortiz” o “Senda Ecológica”, por la cual seguimos ascendiendo suavemente recreándonos en las vistas de su frondoso bosque y los paisajes hacia los que mira el valle, que a medida que se va ganando altura se hacen más espectaculares.

Tras algo más de dos kilómetros de bonito paseo por esta senda, se vuelve a conectar con la pista forestal antes abandonada, para ahora si, afrontar durante algo más de un kilómetro, unas rampas algo más duras hasta llegar al Mirador de las Canchas, espectacular balcón natural que nos permite contemplar la totalidad del Valle de la Barranca dónde además han colocado tres paneles informativos indicando el nombre de los picos, collados, valles, pueblos y demás elementos de la orografía que se puede apreciar, especialmente en un día limpio (no como el que disfruté, ya que aunque hacía buen tiempo, hubo demasiada humedad que impedía la visibilidad a larga distancia).

En este punto se vuelve a abandonar la pista para tomar un senderillo que aparece a la derecha (según el sentido de nuestro caminar), es la denominada la Cuerda de las Cabrillas, una cuerda no es más que un camino que discurre por las lomas de una cadena montañosa, vamos, lo que por allí conocemos de toda la vida como un “camino lomero”, véase “El Lomero Llano”… ¿quién no ha cogido por allí con los Vespinos o bicicletas para ir a bañarse al dique de Los Pinos? … perdón, que ahora nos hemos refinado y hay que llamarlo “El Saltillo” …

Si no se abandona esta cuerda, es un camino relativamente fácil … en subida, pero fácil; lo que ocurre es que yo me estoy volviendo “majareta” y “culo inquieto” y no me puedo aguantar de subirme a tres de las cimas que me encuentro por el camino, lo cuál me terminó de matar … pero vamos por partes:

La primera de ellas es “Peña Pintada” (1.857 m), tras una subida bastante constante y empinada de poco más de 500 metros, pero que se hacen larguísimos con el andar cansino que requiere su ascenso. En su cima una pequeña sorpresa, vean la secuencia de fotos:



(Hasta dinero le ha echao algún cachondo …)

En la imagen anterior se aprecia el resto de la Cuerda de las Cabrillas y los otros dos picachos esperando a que los subiera … (a la derecha se ven algunos edificios de la estación de esquí del Puerto de Navacerrada). Continúo mi camino hasta encontrarme a los pies de Peña del Horcón, donde no pensaba subir, pero se me reaclientan los animos y al final allí que trepe, a 1.879 m. de altitud, y allí que me saque esta “foto fallida” … la podríamos incluir en las “tomas falsas de las senderitis” …

Por último, la tercera de las ascensiones del día, la más larga y complicada ya que era más escalada que otra cosa; el calor apretaba y el cansancio empezaba a hacer mella, no en vano llevaba casi tres horas caminando sin descanso (excepto para las fotillos, pero vamos, “sin apoyá el culo” … ¡ojú, que mal ha sonao eso …!). Justo antes de coronar me dio hasta un pequeño “yuyu”, me tuve que sentar un rato a la sombra, beber y comer algo … pero por mis huevos que subía … y subí, coroné el “Risco de los Emburriaderos” (1.949 m.) y creo que mereció la pena, porque tiene unas vistas geniales, no solo a la Barranca, sino también al valle contiguo por el que se llega al citado puerto de montaña (perdonen mi ignorancia, pero no se como se llama este valle).

Desde aquí el Alto de Guarramillas (nombre real del pico donce se encuentra el repetidor de “La Bola del Mundo”) se ve cercano y asequible y es la ruta que os comentaba al principio que tengo ganas de hacer, pero por ahora … hasta aquí llegué, ahora queda el descenso, mucho más empinado y por peores senderos que el ascenso, así que me lo tomé con calma, al rato me uní a un hombre más orondo que yo y los dos bajamos tranquilamente hasta nuestros coches manteniendo una charla distendida principalmente sobre “el placer de sufrir” …

No os lo vais a creer pero vimos varias setas en el fondo del valle …¡a 9 de Julio! …

Esperando, como siempre, que al menos os hayan gustado las imágenes, se despide hasta la próxima “este cutre aventurero” …

(Esther, y demas féminas asiduas ... espero que disfruten del mozo con poca ropa que sale fotografiado ... jajajaja)...