Estoy más liado que una madeja de lana de angora, por ello pido perdón si no respondo a vuestros comentarios o peticiones (sobre todo la de la sección autodenominada “Bajarse al Moro” … que eso va a ser cuestión de tiempo … mucho tiempo …), pero hago lo que puedo, por ejemplo con esta entrada, llevo dos día y medio escribiéndola, a ratitos, cuando puedo o quiero dar un respiro de mis quehaceres, pero ya está lista:
Continuemos esa “Larga Marcha” (libro de Stephen King … nada recomendable, en el que hay una competición de resistencia y a quienes se paran se lo van cargando …) por el lugar en que lo dejamos, es decir, bajando Valdemartín. Así llegamos al Collado del mismo nombre y tras éste toca afrontar la subida a las Cabezas de Hierro, con no demasiado desnivel (como pueden comprobar en la tabla de “antié”), pero si con cierta dificultad debido a que el pedregal es espectacular:
Aquí vemos como “Mipapi” salta, cual ágil cabritillo montés, de piedra en piedra para poder alcanzar la cima. ¡¡¡Esto si que cansa!!!, ya que no puedes dar ni un paso igual que el anterior y tampoco puedes coger un ritmo de subida porque la irregularidad propia del empedrado te lo impide … imaginaos tener que subir una escalera de doscientos y pico metros de desnivel (unos 70 pisos), pero encima con los escalones como las gradas de la Plaza de Toros de Valverde (que no tiene dos iguales) y sin descansillo … cansa namás que pensarlo, ¿no? …
…Pero al final, entre lo cabezones que somos y que nuestra forma física es mayor que las dificultades que se nos van planteando (… y eso que ya me ven en las fotos, no es que sea un “David Meca” precisamente …) conseguimos subir a la Cabeza de Hierro Menor; en la imagen con la Bola del Mundo al fondo entre ambos.
Ahora toca bajar hasta el pequeño collado que separa ambas Cabezas y subir a la Mayor. El desnivel a salvar es mínimo, pero a pasar de ello nos toma casi media hora el llegar a la Mayor … que ya estamos hablando de “palabras mayores”, no en vano es la segunda montaña más alta de ésta sierra con 2.383 m.
Esta foto “de aquí más parriba”, nos la sacó el peor fotógrafo que jamás me ha tirado una foto, además era un hombre de estos laringectomizados, que no sale, al podre, más que un hilito de voz “rota” … con lo cual no nos enterábamos de nada de lo que decía; “Mipapi” incluso dijo un par de veces en voz alta: “¿éste es extranjero o qué le pasa? …” y yo tratando de explicárselo disimuladamente, pero nada, hasta que no nos fuimos de allí no se enteró. Pero a lo que íbamos, se tiró más de 5 minutos (sin exagerar … exagerando 15 por lo menos …) dándole vueltas a la cima para tratar de enfocarnos, nos hizo poner en un sitio, luego en otro … incluso sacó alguna que otra foto más que no ví hasta que no me dio la cámara …
… y al final para sacarnos a los dos ajustaditos, “mipapi” con la coronilla y la mano cortás; el vértice geodésico sin verse entero … y de la montaña del fondo (Peñalara, la más alta de la Sierra de Guadarrama) solo se ve un poquillo de nieve bajo mi sobaco …; porcierteando ¿os gusta mi blusa del Rayo Vallecano? …
Una vez reposados y repostados en la cima (ya llevábamos más de tres horas sin “posar las posaderas”) …“a bajar se ha dicho” … por una zona más que abrupta, dónde más de una vez hay que echar el culo a tierra para evitar el “ostión padre” … pero, más mal que bien, conseguimos descender hasta Loma Pandasco y luego al Collado de las Zorras; aquí nos encontramos con varios kilómetros de falso llano … ¡una gozada, viendo como esta transcurriendo el diíta! … A esta zona corresponde la imagen siguiente, dónde mirando hacia el Sur, se ve todo el circo de La Pedriza:
Continuamos nuestro camino, pasamos el Alto de Navahondilla y llegamos a Asómate de Hoyos … - Pero, ¿así se llama? - Preguntó “el Moreno” (apodo de la familia paterna) … y la verdad es que no le faltan motivos para sorprenderse, ¡vaya nombrecito más raro! … “Asómate de Hoyos” … ¡se quedó tranquilo el que se lo puso! … además, ¡es que no tiene sentido! … si por lo menos fuera “Asómate al Hoyo” (por el barranco que hay al Sureste) ó “Tírate al Hoyo” … “po fale”, pero ¿Asómate de Hoyos? … ¿y esa “de” ahí enmedio? … en fín, dejémoslo porque como siempre me estoy reliando en la tontería más grande …
… Desde “Asómate de Hoyos” (… es que, ¡vaya tela! …), nos sacaron la fotito anterior, donde se aprecia parte del recorrido que vamos dejando atrás: en la oreja derecha de “Mipapi” (la izq. de la imagen … recuerden “lo del espejo” …) la Loma de Pandasco; justo en su cabeza la mole de la Cabeza de Hierro Mayor y tras ella, la Menor y Valdemartín; un poco más a la izquierda de la imagen se ve La Maliciosa, que aunque hoy no la hemos subido, no paro de recordar lo mal que lo pasé, a principios de verano, en su escarpada cara Sur.
Por suerte tuvimos un día estupendo, con alguna que otra nubecilla disipada que nos aliviaba del fuerte Sol que pega en las montañas y con una ligera brisa, pero sin llegar a pasar frío, más bien lo contrario, pasamos hasta calor en la mayor parte de la jornada; a partir de este punto empezaron a llegar más nubes e incluso fases de intensa niebla que, en algunos momentos, nos hizo pensar en desistir de la última subida, porque no se imaginan lo fácil que es perderse cuando ésta hace acto de presencia.
Pero retomemos el relato: Bajamos al siguiente Collado, el de “Pedro de los Lobos” …¡Ostiá … ¿esto que és? … ¿Heidi?! …; pero antes de llegar nos encontramos con un par de excursionistas que estaban almorzando (ya eran pasadas las tres) y les pedimos que nos sacaran una foto hacia lo que quedaba del día: Los altos de “Bailanderos” (¿Bailanderos con Lobos? …¡Ojú que empachaera de nombres! …) y La Najarra (Foto anterior).
Cuando creíamos que ya habíamos pasado lo peor, aún nos quedaba alguna que otra dura prueba, este Alto de Bailanderos, aunque no llega ni a los 100 m de desnivel, resultó durísimo ya que, como pueden ver en la anterior foto, es todo piedra … y ya saben cómo se sube por ahí …; Una vez arriba, ¡ahora si!, paramos a comernos el enorme bocadillo que nos preparó la noche anterior “Mimami”, media barra bien cargada de embutidos de Los Romeros …¡qué exquisitez! … creí que no iba a ser capaz de acabármelo, pero con la paliza que ya llevábamos y el hambre que ya se dejaba notar, calló el bocadillo, el plátano, un buen puñado de frutos secos … y “a Diós por los piés” si se nos presenta en el alto …
“¡Qué buen catre se agenció el gachón pa echar la siesta!” … usando las piedrecitas que marcan la cima como almohada y con las preciosas vistas del Valle del Lozoya y los últimos pueblos madrileños de la Sierra Norte … lástima que no hubo ni siesta ni ná, la fotito y “a rulá” otra vez … y bajando de Bailanderos nos encontramos con unos “personajes” que nos resultaban bastante familiares:
… así nos sentíamos nosotros, como auténticas cabras montesas, todo el día subiendo y bajando cabezos llenos de riscos … aunque, ellas si que entienden de esto …
Ya solo nos queda la última subida: La Najarra, pero aún hay que pasar algún tramo duro …
… algunas vistas espectaculares de grandes “acantilados” rocosos …
… Pasamos junto al refugio de montaña de La Najarra, que porcierteando, se le ha caído buena parte del muro de la fachada Norte y tal y como ha quedado, o lo arreglan pronto o, al menos, “el menda” no se queda allí ni una noche … ¡Qué miedo! … y no solo por el frió o la soledad y lejanía, sino porque se te puede venir encima …
… y por fin hacemos la última cumbre del día, La Najarra ya está a nuestros pies y la temida “Cuerda Larga” ya la hemos recorrido. En la foto se aprecia detrás de los peñascos donde se ubica el vértice geodésico, en primer lugar Bailanderos y tras éste Asómate de Hoyos (¡no puedo con él!) y en la lejanía y entre nubes asoma la Mayor de Las Cabezas de Hierro; a la derecha el macizo de Peñalara y uno de sus circos glaciares en su falda Este.
… pero … ahora que nos creíamos héroes o algo por el estilo, todavía nos quedaba la bajada, ¡no se imaginan lo que sufrimos! en esa larga y, según tramos, abrupta bajada, con las rodillas fatigadas de todo lo acumulado, éstas parecían estar a punto de crujir y las almohadillas de los meniscos pensábamos que nos las tendrían que cambiar como al amigo Jesús después de esto … pero, con más dolores que una vieja con reuma, conseguimos llegar al Puerto de la Morcuera y, ahora si, culminar esta extraordinaria marcha … y en solo 7 horas (a reloj corrido), lo cual es un tiempazo ya que la guía que llevábamos daban una hora más y sin hacer la última subida a La Najarra.
En la foto con la señal que “da fé” de que estuvimos allí, se aprecia detrás la dichosa “bajadita” que tuvimos que hacer desde esta última cima.
Pero no acabamos aquí la jornada, debido a mi falta de información previa (ya os conté que no me informé de cómo llegar), resulta que donde dejamos el coche no era el Puerto en sí, sino una residencia o albergue juvenil que hay a un kilómetro y medio de allí, así que toca andar por el borde de la carretera como un perro abandonado y cansado … sobre todo eso, cansado…
Aunque nos llevamos una agradable sorpresa: ¡una fuente! … no saben la gozada que es encontrarse con una fuente de aguas frescas y ricas después de llevar más de una hora con la boca reseca … y para colmo miren como se llama:
“ER COSSIO” como esa “gran chirigota valverdeña” … ¡Coño, Alfonso!, ahora me estoy pareciendo a ti …, en la que concurrieron grandes artistas y grandes amigos … así que “VA POR USTEDES, MAESTROS”:
jajajaja... menudo "paseito" y estupenda despedida, eres el "mejón" jajajaja...
ResponderEliminarMe ha encantado la banda (tipo "miss" o "mister") que lucías en una de las fotos, menuda paliza ¿no? jajajaja...
Un besazo enorme para tí y otro para "Forrest" (con todo el cariño del mundo ¿eh?)
Hola Catum, soy quienquierasqueseas, otra vez jejej. Ya sabes que yo te apoyo con las "mascás" pero en las fotos de las senderitis veo a tupapi más en forma que tú......así que ya sabes....dale caña!!!
ResponderEliminarSaludos. Tu blog es muy entretenido. ¡Enhorabuena!
Hola Esther: es que fué ver la fuente y acordarme irremediablemente de ellos ... vaya por done vaya siempre hay cosas que me recuerdan a Valverde ...
ResponderEliminarQuienquieraqueseas: me alegro de que te entretenga. Por otra parte, ¿ves cómo aunque nos pongamos un nombre absurdo al final sirve para identificarnos?, por supuesto que notengo ni idea de quién eres, pero al menos se que escribes por aquí y cuales el ti "historial delictivo" en "este nuestro blog" ...
un abrazo