Nuevo catálogo Ikea

Hace ya algunos meses que os mostré una de “mis aventuras en el Ikea” … lugar que, por cierto, odio … vamos, como todo centro comercial donde quepan más de 100 personas …; donde os mostraba (entre otras cosas) una horripilante maceta de consoladores (ver); tanto me impresionó que desde entonces no he vuelto a ir por allí (y eso que tenía que comprar un zapatero), pero el pasado martes, de nuevo Ikea entró en mi vida …

Había quedado con el amigo Vera en ver el “partidazo” de España en su casa (es que se ha comprao una tele de estas tan grandes que marean … bueno , realmente no se si lo que marea es la tele o las 18 birras que nos habíamos tomado…), resultando que en los previos del encuentro, mientras me echaba un cigarro junto a la ventana, me veo encima de la mesa el Nuevo Catálogo de Ikea, así que, como eso es irresistible, le eché un vistazo …

No se si es porque hacía tiempo que no veía ninguno, porque mi punto de vista respecto a sus muebles a cambiado, porque el diseño escandinavo cada vez encaja menos con el ibérico (no con el jamón, sino con la península) ó simplemente estos decoradores están más sonados que las maracas de Machín (¡vaya comparativa “moderna” que me ha salío! … po ya no la borro …); sea como fuere, ya me di un buen hartón de reír en su casa y espero que al menos compartan si no mi risa, si mi asombro …

Comencemos por una de las primeras páginas del catáligo, si, si … nada más empezar te encuentras con esto:

…hombre, yo entiendo que estos “Frostas” (taburetes/mesas) sean baratos, pero … ¿qué coño hacen metiendo tres mesitas debajo de la litera? … como si allí hubiese todo el espacio del mundo …

… Pero bueno, no quedan ahí todas las utilidades del “frosta”, vean este precioso cuarto de baño:

Con unos “lingotazos” preparados por si “aquello” no baja lo suficientemente fluido … es que están en tó los gachones estos …

… ¿en tó? … en tó y por tó, no veas lo recargás que tienen las casas:

Y no solo recargá, con cajas por tós laos, lámparas para iluminar el Santiago Bernabeu, montones de figuritas y cuadros absurdos, armarios atiborraos de chismes y velas en la misma proporción que lámparas (que digo yo, que mucho se tiene que ir la luz por allí para estar tan preparados …); pero es que además de eso, “Miposa” seguro que no permitiría que hiciesen una foto con ese desorden en la casa: libros y revistas por doquier, una chaqueta de lana tirá por ahí, otras prendas en el otro sillón del fondo, la mitad de las luces encendías a pleno día (vaya ecologistas están hechos) y lo más extraño, en primera plana: ¿qué hace en el salón el taburete de la cocina con dos libros abiertos encima y una taza de café, con su plato, haciendo equilibrio en lo alto? …

… Pero no queda aquí lo desastroso de los escandinavos, al menos el anterior tenía aspecto sobrio … vean lo que ellos llaman “un saloncito juvenil” …

¡Si he visto pisos de estudiantes más recogiditos! …

Pero estudiemos la situación, comencemos, por ejemplo, por el mobiliario: ¡vaya sofás bonitos! … y bien conjutaos, a un sofá rojo con lunares blancos (ni la furgoneta del Leman cuando la decoraba para ir al Rocío) lo que más le pega es otro al lado blanco y con una funda de pelito … vamos eso en todos los decálogos de decoración te lo encuentras … pero sigamos: la mesa del fondo, vale pero ¿y las sillas? … dos blancas, una azul y otra, que no tiene ná que ver con las anteriores, de madera … ¿qué haces tío?, ¿vas recogiendo sillas de los contenedores? …; El resto del mobiliario son cajitas y estanterías cargás hasta “las manillas”, pero ¿y el plasma? … ¿esta gente no ve la tele? … ¿ni el fútbol siquiera? …

Por lo que se vé, este tío es un pedazo de artista polifacéticoya que tiene un manojo de pinceles y pinturillas en la mesita, pero ¿qué estás pintando? … y luego la música le apasiona, allí al fondo tiene la partitura abierta, una viola “por ahí roando” (¡cómo se nota que no tiene chiquillos!, sino le iba a durar menos …), tres violines exactamente iguales colgaos en la pared (es que el chaval cogío un 3x2 del Carrefour) … pero, hablando de colgar cosas, lo que demuestra definitivamente que este “chavalote” no anda muy bien de la azotea: en lugar de colgar los cuadros (que los tiene apoyados en la estantería de la izquierda), además de los violines, él cuelga … (echen un vistazo a la pared del fondo) …

(… venga, echarle un vistazo …)

¡¡¡ UNA SILLA !!! … y además la usa ¡¡ DE MACETERO !! …

Illo, a mi que me perdonen, pero yo bastante mala tengo ya la cabeza como para seguir viendo estas idas de olla … pero bueno, quién tenga interés por ver el catálogo entero ¡que le aproveche! …