
(Manolito bien se podía haber apartado cuando pasó el coche del Google Street View por allí …)
… Y bien que se usaba, hubo una época en que hasta había gente esperando para usarlo de campo de juegos, principalmente fútbol, pero allí también se jugaba a bolinches, lima, trompos, etc, etc.
Decenas de niños de aproximadamente la misma edad nos dábamos cita allí a diario (y los fines de semana también) sabiendo que a buen seguro habría compañeros para jugar … y sin necesidad de tener que mandarnos un mensajito o avisar del evento en Tuenti ó Feisbu … pues allí que nos congregábamos, como dije antes, principalmente para jugar al fútbol, pero han cambiado mucho las normas desde entonces:
NORMAS DE LA “IRREAL ASOCIACIÓN DE FUTBOL DEL CAMPILLO DEL MOLINA”:
1.- No vale dar punterazos: no crean que era banal esta ley, ya que cumplía una doble misión: por un lado salvaguardar la integridad física del esférico, ya que jugábamos con la pelota que “estuviese más rica” (es decir, la más blandita) y un punterazo podía hacer que se le salieran las tripas; y por otro lado velar por las muñecas de quién está de portero, porque más de una mano nos hemos “arrecarcao” en la portería.
2.- El gol de cabeza vale doble: esta ley me la recordó un compañero el otro día hablando del tema, ya que sinceramente no la recordaba … pero lo que sí tengo grabado en la memoria es la imagen del niño (incluso uno mismo), delante de la portería, sin portero y parándose antes de meter el gol para arrodillarse y darle con la cabeza … digo yo que lo haríamos por eso, por que valía doble.
3.- El jugador más importante del equipo, el auténtico valuarte no era el delantero centro (que por entonces no sabíamos ni qué era eso), ni el capitán … el lider del equipo, el que todos queríamos ser era el “portero-delantero”, el único habilitado para pararla con las manos en la meta (ya que no pintábamos ni áreas) y sacarse así mismo, incluso podía y debía irse al ataque y marcar goles …
4.- El “portero-delantero” podía hacer casi todo … casi porque había otra ley inquebrantable que le impedía hacer una de las jugadas más tentadoras: “De portería a portería …tranfullería”.
5.- Las tarjetas y los fueras de juego no existían en ese campo, a cambio, los penaltis eran el único método de hacer justicia, sobre todo cuando se reiteraba en despejar el balón por detrás de la portería … de este modo “a los tres corners, penalti”
No sé porque la Real Federación Española de Fútbol no toma en cuenta estas reglas de juego, porque a buen seguro el fútbol de entonces era mucho más divertido …